¿Destino manifiesto? Que la crowd se vuelva la empresa
He leído algo similar en un lindo libro escrito por AGR y JF 😉 pero señalo la nota por su refrescante sentido de la provocación. De la misma manera que Zuckerberg invita a proveer herramientas a las comunidades Jeremiah Owyang (conocido consultor del grupo Altimeter) invita a proveer una plataforma para que los clientes, juntos con los empleados se vuelvan la empresa.
Lo interesante radica más que todo en dos enlaces: la categoría bajo la cual el autor –reagrupa todos sus notas sobre la economía colaborativa y un informe sobre el tema.
Historia de la palabra «innovación»
Aparecida en el siglo 13 la palabra «innovador» era una acusación muy cercana a «hereje». Se utilizó hasta el siglo 18 para criticar a quienes querían cambiar algo. El auge de las ciencias hizo que el «buzz word» fuera más bien «invención» hasta que Schumpeter le diera el contenido que tiene hoy: algo nuevo que una empresa utiliza en su business model, una invención con aceptación por el mercado. Según Google el uso de «innovación» empezó a rebasar el de «invención» en el 1970 y se sigue usando cada vez más.
El artículo insiste sobre el hecho que se habla más de algo que se tiende a hacer menos. Lo interesante es que se inspira de un estudio a profundidad del uso de la palabra por el canadiense Benoît Godin.
Protestas en Brasil: lo que hacen los geeks
Además de protestar en las calles los geeks de Rio se reunieron para investigar las redes de poder económico de la ciudad y la corrupción ligada al transporte público. El MediaLab de la Universidad Federal de Rio de Janeiro organizó un Hackaday con estos fines y el New York Times sacó un video sobre el evento.
No es la primera vez que estamos viendo este paralelismo entre varias formas de acción. Llama la atención el paso del uso de la tecnología para fortalecer las manifestaciones con las redes sociales a su uso para darle contenido a las reivindicaciones. Un paso de lo emocional a lo pensado que debería, ahora, ser sistemático y por lo tanto… preparado o, por lo menos debatido, contemplado…
Cómo @Guardian llegó al millón de seguidores
Cuatro elementos merecen atención y pueden ser utilizados por muchos de nosotros:
- un uso intensivo de los datos (analytics),
- la búsqueda de una “voz”
- la planificación diaria y semanal de lo que se va a twitear
- la solicitación de los seguidores para conseguir su involucramiento
Lo que más llama la atención es el hecho que nada es “automático” ni el posible recurso a los algoritmos, ni la manera de funcionar de los humanos.
Pandemias y redes
En los últimos días aparecieron casos de un nuevo coronavirus en Europa (Alemania, Gran Bretaña y Francia) y de una nueva forma de influenza (H7N9) en China. Es probable que se transforme pronto en un tema favorito de los medios y de las redes sociales. La mayoría de ellos nos hablarán de los riesgos y de la dificultad de confrontarla con base en sus propiedades biológicas. Cuentan por supuesto.
Pero me parece importante recordar que al lado de lo que se puede hacer (o no) con vacunas (siempre atrasadas) la aplicación de la teoría de las redes ha mostrado ser una de las armas más eficientes. A dos niveles: el de la comprensión de las redes intercelulares de proteínas y el de la contagión, tanto a nivel local cómo en el caso de su impacto sobre las comunicaciones internacionales.
