Digg.com Es unode los 80 sitios más visitados en el mundo (Según Alexa). Evaluada en 200millones de dólares antes del fin del año pasado su valor de mercado no deja desubir y podría ser el objeto de una de las próximas grandes adquisiciones de lared como lo fueron MySpace y YouTube. Sin embargo, esas cifras que cambiantodos los días, apenas cuentan una parte de la historia. Digg se está volviendoun fenómeno. Lo imitan, lo copian lo critican, lo atacan, hasta tratan decambiar su espíritu.

La primera dimensióndel ‘contagio» es meramente cuantitativa. El número de sitios inspiradosmás o menos vergonzosamente en Digg se cuenta en centenares, probablemente pormiles. Con variaciones mínimas, retoman la receta, o sea la presentación deinformaciones escogidas por los usuarios entre todas las posibles fuentes de lared. Las ‘mejores’ son destacadas gracias a un sistema sencillo de votaciónabierto a todos, Una verdadera revolución con relación al funcionamiento de losmedios tradicionales.

La tecnología sencillade Digg contribuye a la expansión del fenómeno. En cuestión de minutos,Pligg.com, un programa open source, permite crear sitios con las mismascaracterísticas. Iniciados generalmente por individuos, comunidades o empresasmodestas consiguen jalar un tráfico significativo. Tal es el caso, por ejemplo,de la página SearchMob de BattelleMedia (battelle

media

.com/searchmob/).Y esto interesa a los grandes.

Lanzado el día dela San Valentín, uno de los últimos sitios de Yahoo se llama Suggestion board,tablón de la sugerencias. Ofrece a los usuarios la posibilidad de criticar y/osugerir mejorías en diferentes servicios como los mapas o My Yahoo. «Lavotación al estilo de Digg nos permite descubrir rápidamente lo que más cuentapara los usuarios» explica el blog de la empresa.» Algunos días mástarde, Dell lanzaba un sistema comparable llamado IdeaStorm.

Los ‘diggers’,usuarios registrados, activistas empedernidos (algunos) denunciaron el plagio. Talvezde manera equivocada. «No es más que un reconocimiento de la eficacia delmodelo Digg» comentó Michael Arrington en su sitio TechCrunch.

Más cercano almodelo original, se supo hace poco que MSN Reporter había lanzado un sistemacomparable a Digg en sus sitios de Bélgica, Holanda y Noruega.

No faltan, sinembargo, las tentativas para desviar a Digg de su propósito.

Las más conocidason las maniobras de grupos que tratan de utilizar el sistema a su favor (eninglés el término es «gaming the system»). El principal valor de laapuesta radica en la extraordinaria popularidad (materializada por un crecientetráfico) de cualquier sitio o artículo promovido por Digg.

Múltiples gruposse ensañan y los responsables de Digg afirman (sin mucho convencer) disponer delas herramientas necesarias. «Que alguien reciba dinero para ello osencillamente trate de ‘romper’ [break] Digg, no importa – nuestros sistemasnos pueden decir lo que está pasando. Los artículos llegan a la página anclasolamente cuando un número suficiente de usuarios legítimos los han puestoahí» escribió el 1ro de febrero en su blog Kevin Rose, fundador yarquitecto en jefe del sitio. Precisó que, entre otros factores, el algoritmoestá siendo «constantemente ‘torcido (tweaked) para reflejar la diversidadde la audiencia de Digg y proteger contra conductas manipuladoras».

Puede ser, peroen un artículo publicado apenas un mes después, Annalee Newitz, periodista deWired News (una publicación que pertenece a CondéNet, también dueña deReddit.com, sitio que compite directamente con Digg) cuenta como compró votosde diggers. Después de haber montado un sitio de muy poco interés, contactó aUserSubmitter.com una empresa que se presenta a si misma como el lugar en elcual «quienes someten notas a Digg pagan a los usuarios de Digg para quelas promuevan. Y en el cual los usuarios de Digg ganan dinero fácil.» Por100 dólares el sitio de Annalee se volvió (brevemente popular).

La belleza delDigg radica en su incomparable simplicidad. «El sistema entero descansasobre el más democrático de todos los instrumentos… una persona, un voto»estima Robert Young, uno de los pioneros de la internet comercial.

Permite tantofiltrar el exceso de información (Digg) como invitar los usuarios a quecritiquen y opinen sobre los productos de una empresa (Yahoo, Dell). Lospolíticos no pueden estar lejos.

Pero Digg no debetodo su éxito al instrumento que permite votar. Existen una serie de mecanismosmás complejos que permiten la expresión de las redes sociales y merecen untratamiento a parte.

 

Listarecientemente actualizada de más de 400 sitios tipo Digghttp://3spots.blogspot.com/2006/04/all-digg-style-applications-list.html

Pligghttp://www.pligg.com/

SearchMob de BattelleMedia http://battelle

media

.com/searchmob/

Suggestion board deYahoo http://suggestions.yahoo.com/landing/

Protesta de losDiggers contra el plagio de Yahoohttp://digg.com/tech_news/Yahoo_Shamelessly_Rips_Off_Digg_and_Brags_About_It

Explicaciones deYahoo http://yodel.yahoo.com/2007/02/14/it-takes-two-to-tango/

IdeaStorm de Dellhttp://www.dellideastorm.com/

Artículo de Robert Younghttp://gigaom.com/2006/09/04/digg-that-fat-belly/

J’enquête, je suis et j’analyse les technologies de l’information et de la communication depuis la préhistoire (1994). Piqué par la curiosité et l’envie de comprendre ce que je sentais important,...